RESEÑA: LAS VENTAJAS DE SER UN MARGINADO

Título: Las ventajas de ser un marginado

Fecha de publicación: 1 de febrero de 1999

Autor: Stephen Chbosky

Editorial: Alfaguara

Páginas: 264

Charlie tiene 15 años y se ha quedado solo tras el suicidio de su mejor amigo. Vive con sus padres, su popular y guapa hermana y un hermano mayor que es una estrella del fútbol americano y que está a punto de comenzar la universidad. Su profesor de lengua está convencido de que Charlie posee una gran capacidad intelectual. Tras conocer a Sam y a Patrick empieza a comprender lo que es ser adolescente, y comienza un viaje hacia la madurez que le llevará a recorrer caminos nuevos e inesperados. Con ellos descubre nueva música, empieza a beber, a fumar y coquetear con drogas, cambia de amigos... ¡Hasta que se convierte en un joven de verdad!

Hace bastante tiempo vi la adaptación cinematográfica de Las ventajas de ser un marginado por primera vez, y no me disgustó, pero tampoco me encantó. Un tiempo después la volví a ver y me gustó muchísimo más. Por eso decidí darle una oportunidad al libro que lo empezó todo (también me animó a ello saber que el escritor era el director de la película). ¿Me arrepiento de haberlo hecho? No. Sin embargo, tengo que admitir que pensé que iba a ser más profundo y que me gustaría mucho más.

"Aceptamos el amor que creemos merecer"

En primer lugar tengo que comentar que pensaba que, pese a ser una adaptación muy fiel al libro, habría escenas que no aparecerían o que serían muy diferentes. Pues no. La película es calcada. A ver, es cierto que no me gusta que las adaptaciones sean muy diferentes del material original, pero también admiro que sepan sacar una visión distinta de la historia, por lo que casi suelo preferir que, mientras el resultado sea bueno, alteren el libro en la medida que puedan (y deban). Creo que si me hubiera leído el libro antes de ver la adaptación me hubiera gustado mucho más, y si vosotros no habéis hecho ninguna de las dos cosas, os recomiendo empezar por el libro.

La historia en sí trata sobre Charlie, un chico especial que acaba de perder a un amigo y que tiene que empezar de nuevo. Por el camino se encuentra con Patrick y Sam, que lo introducen en la vida adolescente típica de las películas americanas. Además se cuenta también todo lo que sucede a su alrededor (con su familia, sus intereses amorosos, su pasado...). La premisa es bastante común (aunque tengo que decir en su favor que es mucho más normalita ahora que cuando se publicó), incluso se puede decir que un cliché, y no es lo más destacable de la novela. Únicamente hay algún aspecto puntual que me ha resultado muy original e inesperado (ejem, ejem, el plot twist del final). Esto ha hecho que la historia me aburra en algunos momentos y que se me haga un poco pesada pese a tener 264 páginas.

"Quiero que sepas que estoy al mismo tiempo contento y triste y que todavía intento descubrir cómo es eso posible"

He de admitir que hay un punto MUY positivo del libro que ha sido de mis partes favoritas. Este era cuando Charlie empezaba a hablar de los libros que leía gracias a la recomendación de su profesor de lengua. Estos momentos me daban ganas de leerme todas las obras de las que hablaba. Por esto tengo que felicitar al escritor, ya que ha conseguido su objetivo: transmitir al lector su pasión por las novelas y su emoción al leerlas.

Y no me voy a demorar más en hablaros de los personajes, porque dan para extenderse y comentar durante un buen rato. El primero y mi preferido es Charlie. Charlie es especial (y tanto), un buen lector y un chico sincero. Guarda muchos secretos, y su forma de relacionarse deja mucho que desear. Por eso cuando al fin consigue tener amigos y que estos lo aprecien de verdad te sientes muy orgullosa de él. Además, durante todo el libro estás pendiente de sus intervenciones, sus pensamientos y sus acciones. Es lo que más engancha: saber qué va a ser lo siguiente que le va a pasar y cómo reaccionará ante eso. Incluso se podría decir que es divertido leer todo lo que se le pasa por la cabeza, porque hay veces que dice o piensa cada cosa... Lo que es verdad es que Charlie se hace un poco pesado en algunas ocasiones (principalmente cuando no puede parar de hablar sobre su tía Helen, que murió cuando él tenía siete años y a la que quería muchísimo). Y muchas veces te sientes muy mal por él, ya que lo pasa fatal cuando algo no le sale como quería o cuando se disgusta por alguna noticia que le dan. Así pues, Charlie es un personaje principal muy dinámico y redondo que puntualmente te pone nerviosa pero que se lo dejas pasar porque es el mejor.

"Y, en ese momento, juro que éramos infinitos"

Por otra parte, Patrick es el segundo mejor personaje. Me debatí interiormente para saber si me gustaba más o menos que Charlie, y concluí que los dos me gustaban por igual, pero que, para mí, Charlie era mucho más complejo (todo el asunto de que le den ataques de pánico y que tenga problemas mentales contribuye a que sea más profundo). Patrick es un chico gay de instituto que está a punto de graduarse, al que llaman Nada, que es hermanastro de Sam y que es muy extrovertido. Lo que me ha encantado es que actuara en The Rocky Horror Story show, puesto que cuando Charlie contaba que había ido a verlos actuar se me hacía muy ligera la lectura. Patrick tiene ciertos problemas por ser gay, lo que refleja a la perfección la situación que se vivía (y se sigue viviendo) a causa de la condición sexual de una persona. Este tema me parece tan delicado y tan real que me parece genial que se refleje las actitudes del resto ante una persona homosexual. Creo que esto forma parte del día a día y debería estar mucho más presente en la literatura juvenil, así que este es otro de los puntos positivos de la novela.

En cuanto a Sam... no me ha gustado. Me explico: no la he odiado ni nada de eso, pero me ha parecido demasiado cambiante. Sam estaba constantemente modificando su parecer y haciendo comentarios contradictorios. No creo que me haya gustado como en la película. He llegado a pensar que era una más del montón pese a lo que se intentara expresar a lo largo de todo el libro. Es irritante en muchos momentos, y en ocasiones estaba deseando que Charlie dejara de hablar de ella siempre, porque no era ni de lejos especial. De hecho, Sam me ha parecido un personaje muy plano, una chica que quiere destacar y por eso intenta ser distinta (pero fracasa con creces). Así que... lo siento por las personas que la adoren, pero a mí no me ha convencido para nada.

"No sé durante cuánto tiempo puedo ir tirando sin un amigo. Antes podía ir haciéndolo perfectamente, pero eso era antes de saber cómo era tener un amigo"

El resto de personajes (los familiares de Charlie y el resto de componentes del círculo de "marginados") me han resultado excesivamente planos. Creo que todos, sin excepción, son clichés americanos que podrían ser los de tantos otros libros para adolescentes pero con otros nombres, pues solo cumplen un papel en la historia para que esta se desarrolle y no se quede estancada. Pienso que todos menos Charlie y Patrick son prototipos adaptados a la historia que lo único de diferente que tienen son sus dramas personales (y aún así, las únicas que destacan dentro de los personajes planos son la hermana de Charlie y su tía Helen).

Hablando del rey de Roma... la tía Helen ha sido el personaje al que más he odiado. No puedo hablar mucho sin hacer spoiler, así que diré que desde el principio te hueles algo por la cantidad de veces que se la nombra en el transcurso del libro sin que pinte nada. Y vaya si hay algo... Paro ya de hablar de ella, que me harta demasiado esa mujer.

En lo que al final se refiere, ha sido perfecto. No había una forma mejor de concluir el libro, así que me alegro mucho de que Stephen Chbosky consiguiera hacerlo de una forma tan genial.

Y para concluir he de admitir que me esperaba más de este libro. Sinceramente, no sé el porqué, pero como todo el mundo lo ponía por las nubes pensé que sería una obra maestra o que, al menos, sería muy bueno. Sin embargo, para mí no lo ha sido. No sé si es por el libro en sí o porque no era el momento, el caso es que no ha cumplido mis expectativas ni de lejos.

RESUMIENDO: Las ventajas de ser un marginado es un libro bueno que no me ha encantado pero que sí me ha dejado un poco indiferente. Tiene buenos personajes (Charlie y Patrick), pero el resto son muy planos. Y pese a que en algunos momentos se hace pesado por ser un poco repetitivo, es ameno por estar escrito por cartas. No es de los mejores para mí, pero tampoco de los peores.

LO MEJOR:

- Charlie y Patrick

- El final

- Estar escrito por cartas

- Los libros que lee Charlie y sus reflexiones sobre ellos

LO PEOR:

- Personajes planos

- La tía Helen

- A veces se repite

- La ambigüedad de Sam

- Está lleno de clichés

PUNTUACIÓN:

                                           

CANCIÓN A LA QUE ME RECUERDA EL LIBRO:

                                           

¿Qué pensáis vosotr@s sobre el libro?, ¿os gusta? Dejadme vuestra opinión en los comentarios <3